Dueños de pequeñas panaderías fueron notificados de que la materia prima subirá en el mes de febrero. Un economista sugiere al gobierno trabajar en garantizar más competitividad para las importaciones de materias primas y abaratar costos.
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La inflación sigue ahogando a los pequeños negocios que a diario luchan como sobrevivir en medio de las alzas en su materia prima, tal es el caso de los panaderos, quienes resienten los altos costos de producción y anuncian que deberán subirle al pan en los primeros días de febrero.
Sumado al alto costo de la materia prima tradicional para elaborar pan, los dueños de panaderías se quejan del precio de la libra de queso, que desde hace dos lunes se ofrece en 80 y 90 córdobas en el mercado Iván Montenegro, en Managua.
De acuerdo con algunos panaderos consultados para este reporte, actualmente gastan en promedio hasta 2,200 córdobas en queso, es decir, el doble de dinero para producir pan a base de queso, por lo que no les queda de otra, que aumentar el costo del producto al consumidor.
Los pequeños panificadores de Managua explicaron que el pan y otros manjares a base de queso, tuvieron un alza desde la semana pasada, hasta de dos córdobas en las pulperías de Managua.
“Una barra de pan de queso grande que nosotros hacemos -le empacamos dos barras en la bolsa- ahora va a valer 52 córdobas, la repostería de queso va a valer 14 córdobas y todavía es un precio bien bajo porque hay otras reposterías que valen entre 30 y 40 córdobas”, explicó un panadero de Managua, que por razones de seguridad pidió el anonimato.
Febrero, más aumento
De acuerdo con el pequeño empresario, días atrás recibió una notificación de la empresa Distribuidora Internacional (Diinsa), quien le notificó que a partir del primero de febrero “todos los productos para la panificación” tendrán un alza significativa, a excepción de la margarina y la manteca.
“A partir del primero de febrero suben todas las materias primas, a esto hay que sumarle el costo del queso y los huevos que ya están altos. Ahorita, una cajilla de huevos me cuesta entre 150 y 160 córdobas”, se quejó el panificador.
Actualmente, un quintal de harina se cotiza en promedio de 1.230 córdobas, un precio casi impagable para pequeños negocios.
“No vamos a comprar queso”
Por su parte, Juan Pablo Estrada, presidente de la Cámara del Pan, salió en defensa de los consumidores y cargó contra los productores de queso, por el alto costo en la libra de este producto, del cual dijo, que aunque no es una materia indispensable para la elaboración de pan hay productos que lo exigen.
“Sube el queso no vamos a comprar queso. Buscaremos una variante, claro hay productos que deben llevar y esos deben sufrir el impacto, pero nosotros no estamos para estar vendiendo caro porque la gente no tiene capacidad para estar pagando más caro. Todos somos afectados”, expresó Estrada.
En ocasiones anteriores, el presidente de la Cámara del Pan, ha denunciando los alto costos en las materias primas y ha exigido al gobierno de Nicaragua, que frene la especulación y que permita más importación de materias primas, lo que vendría a ayudar a abaratar los costos en el precio del pan.
“Carestía tiene solución”
Ante la carestía de la Canasta Básica en Nicaragua, cuyo valor supera los 19 mil córdobas (unos 520 dólares), el economista Enrique Sáenz, explicó en su programa “La Economía de Nicaragua en 10 minutos”, transmitido en sus redes sociales, que los precios de los alimentos en Nicaragua podría disminuir, siempre y cuando el gobierno de Daniel Ortega, tenga la voluntad de resolver la inflación en el país.
Enrique Sáenz planteó que los altos costos de producción en Nicaragua que asfixian a los pequeños empresarios, se deben a que estos se enfrentan a diario con el pago de los servicios básicos, afirmando que en el país, se tiene las tasas más altas de Centroamérica y América Latina.
“El consumidor es el que termina pagando los platos rotos de este control de oligopolios y de monopolios, que determinan los principales precios de la economía del país y entonces estos precios influyen en los cortes de pelo, en las carreras de los taxistas, en lo que venden en los centros comerciales. Hasta en la fritanga influyen”, expresó Sáenz.
“La solución es que haya competencia y que no sean cuatro lagartos los que controlan el negocio, sino que si se trata de generación de energía, compitan para ver quién ofrece las mejores condiciones de venta de energía. Si se trata de combustible, igual hay distintos mecanismos de mercado, no es necesario estatizar nada que permitan abaratar los costos del combustible porque en Nicaragua son los más altos de Centroamérica”, citó como ejemplo el economista.
Cuesta mucho producir en el país
Sáenz refiere que para que los precios bajen en Nicaragua, se requiere que las empresas tengan mejores condiciones de competitividad. También criticó, que producir en cualquier país de centroamérica, sea más barato que en Nicaragua.
“Si un empresario en El Salvador produce tallarines, pero pagan menos por el combustible, menos por la electricidad, menos tasa de interés y menos por las comunicaciones, pues sus costos son menores y puede vender a precios menores incluso en Nicaragua”, detalló.
Enrique Sáenz, propone al régimen de Daniel Ortega “liberar el mercado” para que haya competencia, además de premiar la eficiencia, abaratar costos y “asegurar” que la disminución de precios, se traslade a los consumidores.
“Es posible resolverlo y estoy señalando sólo un caso, por supuesto. Esto no es válido para todos los casos, pero es válido para la mayoría de los casos que tienen que ver con el consumo de el mayor porcentaje de familias nicaragüenses, hay problemas, si se tiene voluntad de resolverlos también hay soluciones”, dijo.
Acusó al régimen de Ortega de ser parte de los negocios. “O es cómplice o encubridor o en todo caso, el propietario de algunos de estos negocios que generan cuantiosas utilidades”, finalizó el economista.