Por primera vez un afrodescendiente llega la Corte Suprema de Justicia en Honduras. Se llama Walter Sabio y ve la inclusión de todas las etnias en el país como un reto a su carrera.
“Este fue el camino para llegar a la CSJ. Yo exhorto a mis paisanos, a las demás étnias, que si cumplimos, tenemos los requisitos, nos atrevamos. Esto es histórico. Honduras se pone a la vanguardia de Centroamérica y buena parte de América Latina”, dijo el nuevo magistrado en declaraciones a la Voz de América, tras su elección.
Sabio tiene un máster en derecho empresarial y 25 años de carrera en la abogacía.
Los 600.000 hondureños de la etnia garífuna, un grupo étnico descendiente de africanos y aborígenes del caribe, por primera vez ven a uno de los suyos allí, en el máximo organismo para impartir justicia.
Hay 48 comunidades garífunas a lo largo del litoral atlántico hondureño, en los departamentos de Cortés, Atlántida, Colón y Gracias a Dios. Pero la pobreza crónica y la desigualdad histórica han forzado a muchas personas de este grupo a emigrar.
Sabio considera que el Poder Judicial debe ser más imparcial y garantizar que todas las etnias nativas, no solo garífunas, cuenten con intérpretes en las audiencias.
“Yo ya no soy solo el magistrado para el pueblo garífuna, sino para el pueblo hondureño”, aseveró.
El magistrado reconoce que el problema de la invasión de tierras que por años han exigido las comunidades garífunas en la zona atlántica de Honduras es un punto muy importante en su agenda, pero que se resolverá según el derecho.
“Tiene que haber gente que sea nativa en las salas, Honduras es un país multicultural en lenguas. Por ejemplo, en comunidades garífunas no hay quien hable español, y por eso debemos conseguir intérpretes o tener jueces de esas etnias”, enfatizó.
Sabio confirmó que en Estados Unidos la comunidad garífuna aplaude su nombramiento y que ya discuten nuevos proyectos.
Fuente VOA