Policía intensificó el acoso y asedio a periodistas en Bluefields, Caribe Sur de Nicaragua este 6 de noviembre.
Patrullas de tropas antimotines de la Dirección de Operaciones Especiales Policiales (DOEP) asediaron la vivienda de la periodista Kalua Salazar, jefa de prensa de Radio La Costeñísima.
Asimismo, una patrulla de agentes antidisturbios se apostó fuera de la casa del periodista y comentarista político Carlos Eddy Monterrey.
Cinco antimotines armados, un agente de tránsito y un policía fueron quienes se encargaron de hostigar a Monterrey, sin siquiera permitirle salir de su hogar.
Igualmente, agredieron a la periodista Ileana Lacayo, a quien intentaron arrebatar un celular.
Por su parte, la casa de habitación de la periodista estuvo rodeada por cinco antimotines, que tomaban imágenes con sus celulares a los familiares de la periodista.
Historial de asedio
El aumento del asedio comenzó a raíz de la protesta cívica Preso 198, en la cual se colocaron pancartas y póster con el rostro del dictador Daniel Ortega acompañado de la frase: “Se va”.
La campaña intimidatoria y el asedio policial a periodistas independientes se continúa agudizando.
Algunas de las acciones que la policía sandinista pone en marcha en su papel intimidar y perseguir la labor periodística, vienen desde instalarse afuera de sus viviendas, tomar fotografías y vídeos a los transeúntes, hasta realizar llamadas telefónicas que sugieren el pedido de refuerzos policiales,
Además, Kalua Salazar fue recientemente declarada culpable en un caso arbitrario llevado a cabo en el local Penal de Bluefields, en el que se le acusó de injurias y calumnias.
Caso parecido es el del periodista David Quinta, del medio digital El Boletín Ecológico, a quien este viernes 5 de noviembre le acusaron por el delito de injurias y calumnias, notificado por el juzgado Quinto Penal de Managua.