Con 70 votos a favor, 15 en contra y 3 abstenciones la Asamblea Nacional, controlada por diputados sandinistas, aprobó la cadena perpetua para toda aquella persona cometa “delitos de odio”.
Con la aprobación de esta nueva iniciativa, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo complementan el trío de disposiciones legales que sirven como instrumentos represivos ante la ciudadanía nicaragüense, a criterio de organismos de derechos humanos como el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Así pues, esta nueva reforma se suma a dos controversiales leyes aprobadas en los dos últimos meses: La Ley de Regulación de Agentes Especiales que permite el espionaje social y la Ley Especial de Ciberdelitos que criminaliza la libertad de expresión.
Reforma a la Constitución
Para aprobar la cadena perpetua como pena máxima, legisladores de la Asamblea tuvieron que reformar el Artículo 37 de la Constitución Política de Nicaragua.
Luego de la reforma, el Artículo que regula la limitación de la pena se lee así:
“La pena no trasciende de la persona del condenado. No se impondrá pena o penas que aisladamente o en conjunto duren más de 30 años.
Excepcionalmente se impondrá la pena de prisión perpetua revisable para la persona condenada por delitos graves, cuando concurran circunstancias de odio, crueles, degradantes, humillantes inhumanas, que por su impacto causen conmoción, rechazo, indignación, repugnancia en la comunidad nacional. La ley de la materia determinará irregulares regulará su aplicación”.
¿3 millones de firmas?
El pasado 27 de octubre, durante la aprobación de la Ley de Ciberdelitos, se presentaron ante la Asamblea Nacional 3 millones de firmas que supuestamente apoyan y respaldan la aprobación de la cadena perpetua.
https://platform.twitter.com/widgets.jsTres millones de firmas de nicaragüenses demandan se sancione con cadena perpetua los crímenes de odio. pic.twitter.com/pva5HIqpvZ
— Asamblea Nacional Nicaragua (@AsambleaNi) October 27, 2020
La cifra es puesta en duda por diversos sectores, quienes consideran que cualquier dato esgrimido por el gobierno y su partido carece de veracidad y legitimidad en los procedimientos, ya que nunca son métodos a auditorías profesionales.
Por su parte, la diputada del FSLN María Auxiliadora Martínez se refirió a esta acción exponiendo que:
“Los diputados y diputadas que estamos en los territorios, fuimos testigos como la gente se volcó a firmar esta petición, como la gente nos decía no solamente quiero la cadena perpetua, por qué no implementamos la pena de muerte. Sin embargo nosotros siendo respetuosos de los derechos humanos, trabajamos la propuesta de reforma al artículo 37 y la presentamos a esta Asamblea Nacional para su aprobación”, dijo la funcionaria sandinista.
“Odio nunca más”
En la discusión plenaria, el diputado de la bancada sandinista Carlos Emilio López dijo que la reforma que endurece la pena a prisión perpetua cumplirá una “función preventiva”.
“Será un alto, un detente, la prisión perpetua, es para decirle al odio nunca más, es para enterrar la cultura y las prácticas de muerte de destrucción del templo humano” declaró el otrora popular legislador sandinista.
“Odio nunca más” es la frase que la designada vicepresidenta Rosario Murillo repite en sus monólogos diarios, soliloquios considerados discursos de odio en que se refiere a las acciones de la oposición desde abril de 2018.