Nueve millones de personas han recibido la orden de evacuar sus hogares en Japón, mientras el país es azotado por uno de los peores tifones de su historia.
El súper tifón Nanmadol ha causado hasta el momento dos muertos y casi 90 heridos.
La tormenta golpeó la isla más meridional del país asiático, Kyushu, el domingo por la mañana y se prevé que pase por encima de Honshu, la isla principal, en los próximos días.
Decenas de miles de personas han debido pasar la noche del domingo en refugios y casi 350.000 hogares están sin electricidad.
Preparados para lo peor
Nanmadol ya ha provocado ráfagas de hasta 234 kilómetros por hora y en algunas zonas se han previsto 400 milímetros de lluvia en 24 horas, por lo cual las autoridades temen grandes inundaciones y corrimientos de tierra.
Se han cancelado los servicios de tren bala, los ferrys y cientos de vuelos. Muchas tiendas y otros negocios han cerrado, y se han colocado sacos de arena para proteger algunas propiedades.
El tifón tocó tierra cerca de la ciudad de Kagoshima, en el extremo sur de Kyushu, el domingo por la mañana, donde provocó el desbordamiento de un río.
La cadena estatal NHK dijo que un hombre murió cuando su coche quedó sumergido en la inundación, y otro murió después de ser enterrado en un deslizamiento de tierra. Otra persona sigue desaparecida y 87 han resultado heridas.
Las imágenes de video mostraban tejados arrancados de edificios y vallas publicitarias derribadas.
Las autoridades pronostican que la tormenta gire hacia el este y pase por encima de la isla principal de Japón, Honshu, antes de adentrarse en el mar el miércoles. La capital, Tokio, ha sufrido fuertes lluvias; una de sus líneas de metro ha sido suspendida debido a las inundaciones.
Más de 500.000 personas residentes en Kagoshima, Miyazaki, Oita, Kumamoto y Yamaguchi se encuentran en alerta de nivel cinco, la más alta en la escala de desastres de Japón.
Asimismo, las autoridades han ordenado la evacuación de alrededor de nueve millones de personas de las regiones de Kyushu, Shikoku y Chugoku tras declarar una alerta de nivel cuatro.
Fuente: BBC News