Estados Unidos facilitará la reunificación familiar y los viajes a terceros países “si fuera necesario” de los presos políticos nicaragüenses que llegaron el jueves a Washington tras ser liberados por el gobierno de Daniel Ortega, aseguró este viernes una alta funcionaria estadounidense.
La Subsecretaria adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EEUU, Emily Mendrala, precisó en una conferencia de prensa telefónica que “cada caso será diferente” y que todo dependerá de los planes de cada persona.
“El futuro depende de cada uno, de su situación, de su preferencia. Algunos tienen familiares en los EEUU y están en el proceso de conectarse con sus seres queridos aquí en EEUU. Otros tienen vínculos y comunidades en terceros países en la región y hasta Europa. Nosotros vamos a hacer lo posible por conectarlos con sus comunidades y facilitar el viaje si fuera necesario”, respondió Mendrala a una pregunta de la Voz de América.
El jueves, el gobierno del presidente Daniel Ortega liberó “unilateralmente” a 222 presos políticos que mantenía en sus cárceles y los envió a Estados Unidos, que los recibió a través de su programa de parole humanitario, tras asegurarse de que cada uno de los prisioneros accedía a viajar de manera voluntaria.
Dos de los que iban a ser liberados se negaron a viajar y de momento permanecen en las prisiones nicaragüenses. Ortega también anunció que a los 222 ex presos se les retiraría la nacionalidad nicaragüense.
Al conocerse la noticia, el ministro de Relaciones Exteriores de España, José Manuel Albares, ofreció darle la nacionalidad española a los 222 nicaragüenses desterrados.
“Hemos estados en comunicación con España. Existe la posibilidad de que algunos van a continuar su camino o querer explorar ofertas de otros países. Tenemos servicio legal en los centros de recepción y consejeros que pueden ayudar a cada a explorar las opciones disponibles para ellos”, indicó Mendrala a la VOA.
Entre los 222 ex presos políticos se encuentran opositores, aspirantes presidenciales, activistas sociales, abogados, periodistas, sacerdotes y diplomáticos. La operación de traslado a Washington se considera como una de las mayores operaciones de este tipo en las que ha participado la Casa Blanca.
“Vemos los eventos de ayer como paso positivo que podría poner a la relación bilateral en un camino mas constructivo”, advirtió la Subsecretaria adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EEUU.
No obstante, Mendrala insistió en que EEUU, “ve con preocupación los reportes de que (el gobierno de Ortega) había cancelado la ciudadanía a estas personas. Queremos recibir mas información sobre esos pasos”, dijo.
No hubo negociación
La alta funcionaria enfatizó en que “no hubo negociaciones” con Nicaragua para la liberación de los presos y precisó que el gobierno de Daniel Ortega “no pidió nada a cambio de recibir a los prisioneros”.
“No teníamos conocimiento de estas intenciones antes de ayer”, afirmó Mendrala, quien aclaró que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP en inglés) se movió rápidamente para completar todos los procedimientos de rigor para conceder el parole humanitario, entre ellos la toma de huellas y el chequeo de antecedentes.
“Una vez que recibimos noticia de la decisión unilateral de liberar a los presos con la intención de enviarlos a EEUU y nos aseguramos que tuviéramos el consentimiento de cada uno, de que en realidad querían llegar a EEUU”, detalló.
En el caso de los dos presos políticos que se rehusaron a ser desterrados, entre ellos el obispo nicaragüense Rolando Álvarez, quien dirigía la Diócesis de Matagalpa, Mendrala afirmó que EEUU va a “continuar llamando por su liberación”.
La Subsecretaria adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EEUU dijo que no prevén un cambio en la política de sanciones que Washington mantiene sobre Nicaragua, sin embargo remarcó que están dispuestos al diálogo.
“Siempre vamos a continuar pidiendo más pasos adicionales de parte del gobierno de Nicaragua de restaurar libertades civiles y democracia para toda la gente de Nicaragua”, dijo.
Fuente: VOA