El Sexchat en niñas es una tendencia. Esta palabra inglesa, contracción de sex y texting, describe a una práctica que se da entre dos personas que se envían mensajes, fotografías o videos con contenido sexual, protagonizados por ellos mismos, a través de sus celulares.
Una vía fácil para el ciber acoso sexual en contra de niños, niñas y adolescentes con dispositivos móviles
En tiempos en que un smartphone es parte de la vida cotidiana, el sexo no podía quedarse afuera. A eso se le suma que la gente está un poco más abierta”, analizan expertos.
El intercambio de mensajes y fotos de alto voltaje se da en parejas que recién inician o en el momento del conocimiento previo, aunque también en las afianzadas que quieren mantener la pasión.
El sexchat es en un ejemplo de intercambio.
Enviar fotos insinuantes o con carga erótica es parte de la conquista y de las relaciones amorosas, este envió de fotos subidas de tono se ha vuelto el quehacer de los adolescentes.
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El sexchat es una vía para el abuso y el acoso cibernético
Hombres se hacen pasar por jóvenes, y a través de whatsapp, Facebook o cualquier otra red social, se comunican con las niñas, iniciando un proceso de “enamoramiento” en el que caen estas niñas para convertirse en una víctima más.
Peticiones como “mándame una foto rica” es el inicio de un círculo que vulnera directamente a la niña, donde esta, accede a todas las pretensiones de estos individuos.
Estas fotos intimas son publicadas en plataformas dedicadas al entretenimiento de depredadores sexuales,
Estos buscadores de sexchat pagan una exclusiva suma de dinero para acceder a estas plataformas y que buscan alimentar su sed con fotos o videos de niñas.
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Grabaciones de actos sexuales, consecuencias del Sexchat
En la realidad de las relaciones sentimentales de adolescentes que carecen de bases para fortalecerse, además de la falta de madures emocional y psicológica, se nota un alto volumen de intercambio de fotos eróticas.
Por lo tanto, las grabaciones durante el acto sexual, simbolizan un riesgo para ambas partes en una posible separación.
Ante esta tendencia, los padres de familia deben actuar y prevenir a sus hijos e hijas,
ya que detrás de la pantalla del celular, podría estar un depredador sexual.