Un grupo de creoles mantiene un tranque a la altura del puente Suampo de Lara, jurisdicción de Bluefields, en la Región Autónoma de la Costa Caribe Sur (RACCS), en la nueva carretera que une esta ciudad con Nueva Guinea, en demandas por que las autoridades de la Procuraduría General de la República auxiliados por la Policía Nacional no los desalojen de las parcelas de tierras que les adjudicó hace días el Gobierno Comunal Creole de Bluefields (GCCB).
Esos creoles fueron adjudicados sobre 300 manzanas de tierras que le pertenecen al Banco Central de Nicaragua (BCN).
Denrey Hodgson, secretario del GCCB, explicó que ésa propiedad la adquirió el BCN luego que una pobladora hace años hiciera un préstamos ante una financiera y luego no pudo pagar su préstamo.
“Nosotros le advertimos al presidente Ralph Mullins (presidente del gobierno comunal) que no podía adjudicar sobre esas tierras porque le pertenece al Banco Central de Nicaragua, pero no hizo caso y ahora está el problema con la Procuraduría”, informó Hodgson.
Mullins, en tanto, dijo vía telefónica que los creoles adjudicados no abandonarán sus lotes y que más bien resistirán ante las autoridades.
Rendel Hebbert, exfuncionario de la Comisión Nacional de Demarcación y Titulación (Conadeti), comentó que las autoridades comunales de Bluefields fallaron al adjudicar a sus creoles en las tierras que el presidente de Nicaragua les tituló en octubre de 2016.
Hebbert indicó que para adjudicar propiedades a favor de una minoría étnica, primero hay que iniciar y concluir el proceso de saneamiento de la propiedad comunal, “si no habrá problemas tras problemas”, dijo.
Una fuente gubernamental confió a La Costeñísima que las autoridades municipales, regionales y del gobierno central, ofrecieron apoyo al gobierno comunal que presidente Mullins, pero “no aceptó la propuesta que se le hizo, la propuesta fue entregarle 15 manzanas de tierras en otro sitio a cambio que abandonaran las tierras del banco”.
El 29 de octubre de 2016, el presidente de Nicaragua Daniel Ortega, en un acto público en Managua, entregó al Gobierno Comunal Creole de Bluefields 159 mil hectáreas de tierras de Bluefields para su uso y disfrute, pero sin poder de venta.
Un informante del Gobierno Comunal Creole de Bluefields denunció que la Policía junto a funcionarios de la Procuraduría, entre otros, se presentaron al sector de Suampo de Lara donde los creoles habían construido una casa base, y ahí “nos quemaron la casa y se llevaron una madera que teníamos ahí para hacer otras construcciones”.
La Procuraduría General de la República, abogado del Estado, insiste que hará respetar las propiedades del Banco Central de Nicaragua.