La policía de Bluefields no permitió que se realizara la misa de “Réquiem” que se lleva a cabo cada año en el cementerio, y la cual se dedica al descanso de las almas de los difuntos cuyos restos yacen en el campo santo.
La mañana de este jueves 02 noviembre, oficiales de policía abordaron en la entrada del cementerio al obispo Francisco Tijerino, de la Diocesis de Bluefields, quien se dirigía a presidir la misa, momento en que los oficiales le comunicaron que “no había permiso para realizar la misa en el cementerio” la cual se tenía prevista a realizarce a las 10 de la mañana.
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Dentro del campo santo ya se encontraban instalados los toldos, sillas y parlantes para que las familias católicas pudieran asistir como de costumbre, pero minutos después fueron desmontados.
Personas que se encontraban en el lugar y esperaban participar en la misa, mostraron su descontento con la decisión de la institución policial.
La misa tuvo que realizarse a las 5:00 pm en la Catedral Nuestra Señora del Rosario, de Bluefields.