El recién finalizado 2022 tuvo mucha actividad natural el periodo de huracanes, con la presencia de Bonnie y Julia, dos fenómenos que afectaron severamente la región y parte del país.

Inundaciones, deslaves de tierra, perdidas de cosechas, viviendas, contaminación de cuerpos de agua de consumo humano, caída de la capa boscosa frágil entre otros daños menores.

Con el paso de Bonnie más de 3000 personas fueron albergadas y 352 viviendas quedaron inundadas producto de las lluvias en todo el país. Mientras que Julia dejó 367,8 millones de dólares  en daños detallaron autoridades de SINAPRED y el ministerio de Hacienda y Crédito Público.

Para la Ecóloga Gladys Luna las afectaciones de estos fenómenos naturales también se percibirán en 2023, ya que el ciclo de daños no finalizó con el paso de los huracanes y tormentas, y que la raíz del problema esta en el daño contante que mantiene el medio ambiente.

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Donde el mayor responsable es el ser humano, mediante el uso desmedido de los químicos, agua, flora, fauna y la sobrepoblación de basura en ecosistemas acuáticos, son el génesis de todo fenómeno natural.

“Este es un indicador que nos enfrentamos a una realidad climática extrema mucho mas severa, estamos viendo también como más áreas están siendo deforestada, y al no tener cobertura vegetal el suelo desprovisto de esa protección que tenía para retener el agua, filtrarla e irla liberando poco a poco a los pozos” advierte la experta.

Por lo que desde hace unos cinco años se nota que las inundaciones en Bluefields son más agresivas, y lluvias de veinte minutos han causado anegaciones.

La experta se cuestiona las medidas que están tomando las autoridades, para frenar este daño ambiental y que se afecte al casco urbano.

“En material de clima es difícil predecirlo, pero si la población no estamos sensibilizados por que en cualquier momento nos viene un fenómeno natural como lo son los huracanes, y no tómanos medias sobre forestar las área circundante, cuidar los manglares por que son la barrera natural para que el viento no afecte tan fuerte a la ciudad, y tampoco estamos consientes de manejar bien nuestros sedosos sólidos, la basura principalmente pues esto va a ser catastrófico cada vez más”

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